Si creías que tu cruel adiós iba a conmocionar al
pueblo, estabas equivocado.
Si pretendías terminar las obras inconclusas antes
del fin de tú mandato, estabas equivocado.
Si admitías que la deuda pública superaría lo
previsto, indefectiblemente el “fin” está a la vuelta de la esquina.
Si pretendías armar un equipo de trabajo con convicciones,
y no respetarlo, no solo estabas equivocado sino que la “tropa” más tarde o más
temprano, dimitiría.
Si creías que con la cara de inocente o… de yo no
fui, podrías mantener el poder…estabas equivocado, muy equivocado.
Si pretendías mantener las mentiras y los anuncios
como eje del gobierno, ya habrás probado que tú tiempo terminó.
Si antes las fotos y los discursos sin sentido,
eran tú fuerte, hoy podemos decir que c´est finí.
Lo peor está por llegar, la justicia, los fiscales
y hasta los jueces saben que tú mandato tiene fecha de vencimiento.
Pocos serán los que se mantendrán a tú lado, es
predecible que la mayoría inventen excusas, con tal de no acompañarte.
Los funcionarios ya no hablan, y aquellos que lo
hacen están tampoco convencidos, que no solo no convencen, sino que producen el
efecto contrario.
Las propuestas, los planes, los proyectos…no
existen, son solo ilusiones de unos pocos que pretenden convencer como lo
hicieron en años anteriores. Pero hoy…se acabó, c´est finí.
Hasta lo empleados apoyaban, ya sea por
conveniencia o por temor. En las últimas horas…les da lo mismo. Solo esperan el
cambio. El final.
C´est finí (se acabó).
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