ARGENTINA GENEROSA ¿CONFRONTACIÓN O ARMONÍA?

Me pareció estar soñando…era imaginación o sucedía realmente?
Como en una nebulosa crucé la frontera, el país tenía un cartel…”ARGENTUM”. Entre nubes, claroscuros y bondades de avecillas cantarinas me enfrenté a varios senderos. Cada uno de ellos; pero de diferente manera; me llevarían al corazón, al meollo de dicha tierra. La cuestión era probar.

Elijo el primero…comienzo a caminar…me encuentro con un cartel que explicaba: “Sendero de los obstáculos”. Grandes rocas obstaculizaban el tránsito. ¿Casualidad…? Cada roca tenía su nombre. Eran INSEGURIDAD, CORRUPCIÓN, VIOLENCIA, AUTORITARISMO, INCULTURA, DISVALORES, DROGAS, AGRESIVIDAD. Se veía que hacía muchos años que estaban en ese sendero de Argentum. Por casualidad observé a alguien sentado en una de ellas y pregunte por las piedras. Me respondió que los obstáculos no estaban allí en el principio, sino que los habíamos traído nosotros como sociedad y que un duende llamado OMISIÓN impedía ahora removerlos.

Me desalenté y enfilé hacia otro caminito…tenía un nomenclador que con letras tenebrosas anunciaba: “CAMINO DEL PENSAMIENTO ÚNICO”.
Lo antecedían algunos personajes con pancartas que rezaban “¡Sí, Sí, Sí!” Atisbé una advertencia… “no se retire del predio, sin el certificado rotulado de AMIGO O ENEMIGO y…después…aténgase a las consecuencias”

No me pareció saludable y enfilé hacia otro sendero. Al iniciar ese caminito hallé dos grandes afiches con llamativos colores que invitaban a una falsa; después me di cuenta; admiración.

El primero decía “VOTAR es una COARTADA”. Me costó comprenderlo… ¿coartada para quién? Una lucecita relampagueó…claro…Coartada para justificar la ineptitud e impunidad de muchos dirigentes políticos…buenos para nada. Los ciudadanos comunes acá no ganaban nada. Servían simplemente de excusa blanqueadora con su voto.

El segundo afiche proclamaba en su título: “CURROS COMPARTIDOS”…como algún programa de construcción que anda dando vueltas por el terruño.
El hedor a podredumbre me convenció de la inconveniencia de ese lugar, aunque siga reinando en ARGENTUM y se quiera proteger.

Con desánimo en mi espíritu y algunos chusquitos, llamados MERCENARIOS, ladrándome, me dispuse a evacuar la zona y retirarme de Argentum. Rumbeaba hacia la frontera cuando; escondida, disimulada, observe la entrada a un nuevo senderito. Me acerqué, enfoqué mi vista hacia un pequeño letrero que decía: “CAMINO DE LA ESPERANZA” flanqueado por diversas inscripciones. Una significaba… “no preguntes que hace el país por vos; sino ¡qué haces tú por tú país!
La segunda decía “Están los que saben y son minoría; están los que no saben y creen que saben y están los que no saben y saben que no saben…usted…¿Dónde se ubica?
La tercera rezaba: “Se puede mentir a toda la gente, parte del tiempo. Se puede mentir a parte de la gente todo el tiempo. Pero no se puede mentir a toda la gente, todo el tiempo”
La última expresaba: “La agresión, la intolerancia, la corrupción abierta o disimulada, terminan abriendo camino al DEMOCRATICIDIO”

Vacilé, cavilé, un reflejo de luz tornasolada iluminó la pequeña entrada y una grácil mariposa multicolor se floreó ante mí…Una estrella fugaz dibujó el camino de la ESPERANZA y decidí darme otra oportunidad.
Reflexionemos y démonos todos otra oportunidad.
Tal vez no lo merezcamos pero…ARGENTUM es una tierra muy generosa y sigue resistiendo nuestros delirios y bajezas.

Hasta la próxima.
G.R.STURLA
Sturla.gui@hotmail.com

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