Gastón, el “estadista”…un amigo

Me di el tiempo suficiente como para hablar de Gastón Guarracino, no el Senador ni candidato a Intendente, o Vice Ministro de Trabajo…solo Gastón…un “Amigo”

Tuve la suerte que Eduardo Pérez Moretti, me presentara a Gastón en el año 2003, cuando era Senador por la Quinta Sección Electoral; Esas reuniones se hacían en la casa de Eduardo donde se planeo las visitas al Consorcio de Gestión del Puerto de Quequen, de varios embajadores.

Ahí pude entender, comprender y admirar a Gastón. Ya estaba pensando cuatro años adelante. Se avizoraba lo que podíamos llamar un genuino estadista.

Era un estadista – repito – porque se anticipaba al futuro. Soñaba como si fuera un imposible, pero en sus fueros más íntimos, sabía que era posible.

Nunca confundió su plan a largo plazo, con actitudes electoralistas del momento. Como buen estadista no miraba las encuestas y distinguía muy bien la apariencia de la propia esencia.

No prometía obras como si estas ya estuviesen materializadas, todo lo contrarío las planeaba y fijaba un plan para ello.

Por ser un estadista, sin duda que no cosechaba beneplácito de los mediocres y de los oportunistas. No les daba espacio para ello. Por esto mismo eran pocos los que lo aplaudían en épocas de derrotas.

Como tenía su ideleogía bien definida y estaba abierto para escuchar a todos, manteniendo una coherencia en su pensamiento y accionar, hacia que fuere un dirigente político – como pocos- en quien confiar.

Los estadistas como él, son sumamente escasos en el devenir de la historia de Necochea. Pudiendo incluso hasta contárseles con los dedos de una mano. Uno de ellos…fue Gastón.

La cotidianeidad del distrito y nuestra realidad – particularmente en el último tiempo – se suele asignar la categoría de estadistas a “ciertos actores”, que en mi opinión están a años luz de Gastón.

¡Que desparpajo! Pareciera que por un efecto comunicaciónal, hemos venido construyendo un sinónimo francamente perverso: que estadista significa lo mismo que demagogo.

O acaso se puede comparar a cualquier candidato con quien trajo al Embajador de la China Ke Xiao Gang, para estrechar lazos, alianzas entre nuestro puerto y la economía mas importante de hoy en día.

O cuando organizo las visitas de los Embajadores de la Republica de Vietnam o el mismo Embajador de India, acompañado por una de las empresas más grandes en ferrocarriles llamada Tata.

Todo esto ocurrió entre los años 2003 y 2004, cuando también organizo la llegada del Embajador de Brasil, o sus visitas al polo tecnológico de Itaipú. Y mas recientemente (2007) la posibilidad de la instalaciones de un polo tecnológico de Biodiesel.

Estaba preparado y en condiciones de conducir a su pueblo, nuestra querida Necochea. De ahí su diferencia de cualquier político común.

Gastón había trascendido las fronteras no solo de su querida ciudad o provincia, era reconocido en varios países.

Desde hace un año, que insistentemente me decía: tenemos que conseguirme un reemplazo para el 2015, porque mi Intendencia será de tan solo cuatro años. Pero suficientes como para dar vuelta – como una medía – la historia de Necochea.

Y ya tenía al hombre que lo sucediera, pero su silencio… su mirada picara y… su sonrisa permanente, indicaba que era alguien a quien estaba estudiando.

Solo me dijo: “no te doy el nombre, porque como sos un periodista incisivo, reconocerás en el, los errores míos. Pero es ejecutivo como pocos, buena persona…tanto que no fuma, no bebe, etc., etc.”

Conociendo su pasión por la India, y recordar a Gastón Guarracino como se debe, una frase de Mahatma Gandhi reseña su vida:

Vive como si fueras a morir mañana. Aprende como si fueras a vivir para siempre.

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