FUNCIONARIOS AL BORDE…(DEL BORDA)

El nerviosismo de los funcionarios del Ejecutivo Municipal, se notan hasta en las conferencias de Prensa.
Hacen tan solo algunas horas cuando el Secretario de Gobierno, Mario Diez accedió a las preguntas periodísticas (ya preparadas), se noto la reiteración de los conceptos, tratando de descalificar a los periodistas.
El tema fue como siempre la denuncia ante la fiscalía sobre el Consorcio de Gestión del Puerto Quequen.
Uno de los párrafos donde quedo en evidencia este nerviosismo, fue cuando el Secretario de Gobierno dijo: “el centro de la escena es que cumplimos con el deber de funcionario público, lo tienen que decir clarito (refiriéndose a nuestros colegas) y creo que esto es necesario, yo no le voy decir (instante en que pensó) y… de ninguna manera… (busca las palabras exactas),… lo que ustedes tienen hacer (la orden), que quede claro esto también, para el periodismo”.
Tan solo unas pocas palabras para intentar decir lo que quiere, pero no sabe como, duda, piensa y comete el error de dar la “orden”, sobre lo que periodísticamente debemos hacer.
Para agregar: “No puede ser una palabra más o palabra menos, una imputación a una cuestión netamente periodística”.
¡Otra vez la culpa a los que comunicamos!
No quiero pensar en la actitud de nuestros colegas, en esos instantes.
Pero le falto algo mas: “Que la gente haga su propio juicio de valor, si es una operación mediática del ejecutivo, o es una cuestión política o es una cuestión periodística”.
Limita lo que el ciudadano tiene que pensar, pero por las dudas la culpa nuevamente a los periodistas presentes.
Pero si algún psicólogo quisiera intervenir, esta es la perlita: “Lo venimos diciendo desde el momento que el Intendente efectuó la denuncia correspondiente y pertinente, y lo que nosotros hacemos es cumplir con el deber de funcionario público y que se transparenten las cuestiones de la que no se quieren hablar”.
Aquí demostró que hay cuestiones de la que, ¡no hay que decir nada!, distinto a los pensamientos del Ejecutivo Municipal, hay que desviar los temas de fondo.
No se puede hablar de la falta de plata, de la Escuela Municipal de Artes sin funcionar, del reclamo por falta de pagos de becas para la producción de arte.
Menos todavía del Camping Miguel Lillo, de la concesión de los balnearios, del frente costero, de las ambulancias sin funcionar.
Tampoco de los caminos viales, de la licitación privada de la obra del gas para el Complejo del Casino (con sobreprecios), de los problemas de salud de los funcionarios públicos por “stress”.
¡Pero muchachos! hablen del derrumbe financiero de los Estados Unidos, para que podamos justificar todo lo que se nos viene, ¡por favor se los pido¡(se escucho detrás de la puerta del despacho, del Intendente Dr. Molina)

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